I Am The Walrus – The Beatles

Ya podía yo esperar al 45…

En otro orden de cosas, hoy me he acordado de don Miguel. Estaba esperando que se hiciera la hora del examen, sentado en un parque oscense, escuchando algo de música para quitarle trascendencia al momento.

De repente, ha sonado Diamond Sea, de los Sonic Youth, y he decidido concederme un par de minutos de recreo, y cerrar los ojos, y tumbarme sobre la hierba, y permitir que el sol me diera en la cara por entre las hojas de los árboles, sin hacer nada por impedirlo, y dejarme mecer por el ruido y las guitarras, y me he acordado de don Mameluco, el sempiterno depresivo (que en absoluto deprimente), que también está pasando unos buenos días, como yo.

No se preocupe más, señor mío.

Le van a preguntar el 8, 9, 10, 29 y 49, que los he tenido yo esta tarde.

Un abrazo.

Ahora, a esperar a que se me haga de noche para empezar los días.

Número de familiares en el extranjero: 1. Haz el favor de no enfadarte con  tu madre por gilipolleces.

Washing Machine – Sonic Youth

Hoy, buena música. “Washing Machine”, por Sonic Youth.

Si por algo se caracteriza el ser humano moderno es por el chorro continuo de referencias y nombres que maneja. Y cuanto más chupiguays y menos conocidos sean, pues mejor. Auster, Kaurismaki, Tom Waits, Kiarostomi, Von Trier, Lynch, Goodrich, Aronofsky, Sonic Youth. La lista es interminable.

«Washing Machine» no es ni de lejos el mejor disco de Sonic Youth, para gustos los colores. Estos cuatro neoyorquinos ya talluditos nos han dejado grandes albumes llenos de ruido y furia (ponga usted su disco favorito de los Youth aquí), pero me decanto por «Washing Machine» por tres motivos principales:

Número a: Motivos sentimentales. Amor me grabó hace mil años y medio una cinta con un disco cuyo nombre no recuerdo ahora en el que me incluyó de bonus tracks «Becuz», «Little Trouble Girl» y los diez primeros minutos de «The Diamond Sea» (dura casi 20).

Número b: Supone una aproximación al mundo de los Youth bastante asequible, ya que es un disco que entra relativamente suave pero manteniendo su personalidad. Ruido y guitarras domados por la mano de una multi. Así podrás hablar de los Youth habiendo escuchado, por lo menos, un disco suyo.

Número c: El que no haya deseado alguna vez tener una camiseta como la de la portada no es lo suficientemente moderno para merecerse estar leyendo esto. Circulen. Aquí no hay nada que ver.

En la foto, cada vez que alguien menciona a Sonic Youth en vano Dios mata a un gatito.

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En otro orden de cosas, ayer fui al Carrefour y me lo habían cambiado todo de sitio. Jode un montón cuando hacen esas cosas, cuando alteran el orden de tu pequeño mundo para que no encuentres el pan de molde. No jode tanto como que el colega con cuyo coche contabas para llevar después de haber currado dos bolsas de comida para perros y cinco litros de lejía densa te llame a mitad de tarde para decirte que no va a poder ser la cosa. Jode cuando un amigo te deja colgado por la chica, pero jode más aún cuando lo hace por los padres de la chica. La semana que viene me vas a hacer un soufflé y no se te va a hundir, cabronazo.

No tengo ni idea de qué hacer para mi cumpleaños. No me apetece meter a todo el mundo en casa por no tener que limpiar al día siguiente, y no me apetece celebrarlo en un bar porque temo no tener tanta pasta. ¿Alguien da alguna idea?

Número de familiares en el extranjero: 1.